Microcuento
Fantasía
Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México
Aprendiz de copiloto
Por Vilma Edith PÉREZ CERVANTES
Matamoros, Tamaulipas, México
Aluxes panchanicos
Por Roman LÓGLEZ
Palenque, Chiapas, México
Descargas
Por Raúl DE THESY Y RR
Palenque, Chiapas, México
Poetuits
Desenfrenado
Por César RAMOS
Ciudad de México
Poesía
Magdala
Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México
La luna en el bolsillo
Por Juanita POCHET
Buenos Aires, Argentina
Amantes Eternos (D.R)
(Romance)
Por Yolanda CEJA GARCÍA
Ciudad de México
En Libélula nocturna Mayo 2016
Algarabía (Soplos en reclusión) y Aquí
Por Blanca Estela ROTH
Ciudad de México
|
|
||||||
Poesía
Magdala
Por Mario
Luis ALTUZAR SUÁREZ
Tuxtla
Gutiérrez, Chiapas, México
|
Micro cuento
Aluxes panchanicos
Por Román
LÓGLEZ
Palenque,
Chiapas, México
|
||||||
El dulce sabor de tu engaño
Emergió del fondo de tus ojos
Destruyendo mi alma indefensa
Con el amargo sabor del fracaso
Y si la inteligente mentira
Por la verdad fue vencida
Se fragmentó mi corazón adolorido
Martirizado por la traición infame
Fuiste en mi pensamiento, mujer
Lo que te negaste a ser a mi lado
Hacer de nuestro amor un Templo Sagrado
Y escogiste el sendero de lujuria y placer
¿A cuánto ascendieron los 30 denarios?
Por mucho que se haya pagado
Jamás compensará lo que habías anhelado
Y que hoy dejas totalmente abandonado
Vive ese tu recuerdo de entrega fingida
Creadora del falso amor apasionado
Que mostraste al temblar en mis brazos
Como tiemblas al sumirte en lo profano
El dulce sabor de tu engaño
Se mitiga con la superficial victoria
De haber disfrutado sin pago alguno
Lo que otros tanto han pagado
Más el recuerdo adormecido de tu aroma
Asfixia el insomnio de mi lecho
Que nuca fue mío y siempre será de otro
Con ese dulce sabor de tu engaño
Con el que se paga mi pecado
De tanto, tanto haberte amado
|
Andar por los senderos del Panchan, te lleva a una exorbitante aventura
de convivió y de gran placer. Bajos de esa microselva perennifolia, puedes
sentir la paz interior fluir por tus venas a una velocidad luz universal, luz
prehispánica o simplemente Luz que te lleva e ilumina tu camino.
¡¡Aaaahh...!! Pero no todo puede ser perita en dulce; por eso, hay que estar
muy alerta dentro de este paraje afrodisiaco, puesto que circulan a plena Luz
y por la noche, después de la media, guardianes de las aves, animales y del
monte: "Los Aluxes'. Duendes que se confunden entre los niños del
Panchan en que podrías estar charlando con uno y tomados de las manos sin
saber de su existencia, pero...¡¡lo es!!. Mientras tu espíritu no cargue con
tanta maldad, no pasa nada. Pero también hay algunos que jugando, jugando te
llevan hasta la microselva o al inframundo; Es el caso de nuestro amigo
Willy, seguridad del Panchan; fue engañado por unos niños Aluxes, que le
pedían auxilio para una persona herida dentro de la selva y muy confiado
éste, se dejo guiar y efectivamente, alguien se quejaba de dolor y por su
espíritu de prestador de auxilios, se dejó llevar por aquellos pequeños.
Willy advirtió que ya habían caminado horas y por su puesto, ya estaban lejos
del Panchan; trató de darse la vuelta, vio que se le cerro el camino, sintió
que se le entumia la sien y el cuerpo por corrientes antárticas que lo
envolvíeron a casi paralizarlo; aun así se aventuró, pero no logró saber
donde estaba ubicado y empezó a gritar y de esta forma algunos amigos
lograron ubicarlo y sacarlo de allí de donde los pequeños Aluxes, se lo
habían llevado; nuestro amigo Willy, apareció todo rasguñado del rostro y la
ropa, hechas tiras y narró, como se había introducido a 5 metros de
vejetacion, pero que se le hizo a ver caminado 200 kilómetros. Por ellos
amigos, si te gusta la aventura, ven al Panchan, para tener una grata o
amarga experiencias adrenàlica, común, en todos los aventureros.
Junio 21 de 2018.
|
||||||
Poesía
La luna en el bolsillo
Por Juanita
POCHET
Buenos Aires,
Argentina
|
Micro cuento
Descargas
Por Raúl DE
THESY Y RR
Palenque,
Chiapas, México
|
||||||
Canto
al río que corre por mi garganta,
a los galopes que se agitan en mi pecho,
al dolor de la piel que arde en desespero,
a la palabra quebrada y al olor de mis huesos
a la causa de nuestros desaciertos,
al fin dél infinito y al humo de mi cuerpo,
al silencio que se esculpe en mis senos,
a mis manos y a mis pies ya sin freno
a mi cúspide vaga y a mis antojos fieros.
Canto
a la inocencia que mi voz siempre ampara
al valle de esperanza desnudo entre mi sangre,
a la pasión volcánica que mis ojos derraman,
a la brisa que llega cuando todo se acaba.
CANTO
Canto a mi canto,
lira que desborda en un mar su sonrisa estrellada
y le canto al verdor de la estación primera
que se abre como rosa para nacer del aire,
a los días de infancia y a la añoranza cierta
del poeta que anhela descubrir nuevas sendas
y te canto y te canto, enmudecida, absorta,
con la pasión qué nunca te nombrará otra boca.
Vuelta a Casa - editorial y artes
gráficas
calle 10 Nº 1586
La Plata - Argentina
Queda hecho el depósito que marca la
Ley 11.723
Impreso en La Plata, Argentina
|
En ocasión de celebrar el cumpleaños de un personaje del pueblo que es
dueño de un rancho, se organizó la clásica carne asada; y a bordo de
vehículos diversos fueron llegando los invitados y alguno que otro que no lo
fue pero que era "amigo de la prima de un señor que no pudo
asistir"; como dejara dicho el gran Chava Flores. El caso es que al
calor de la cerveza que corría a mares, algunos invitados fueron pasando al
baño y los que no eran parte de la élite se empezaron a encaminar hacia las
arboledas cercanas hasta sentir el alivio de la descarga orinal y entre estos
se encontraba Vladimir que con la vejiga llena tomó el mismo rumbo de los no
invitados puesto que aún no había sido bautizado con las mirificas aguas del
supremo sacerdote moreno; y, como no hay mexicano que orine sólo, se acercó a
un alambrado donde los otros contertulios soltaban el producto de la gorra y
en un acto de su conocida prepotencia preguntó porqué únicamente había un par
de hiladas de alambre explicándole uno de sus compañeros que se trataba de un
cerco eléctrico que se usaba para detener a los semovientes con una descarga
en caso que intentaran salvar el cerco; lo que molestó al güishón y para
demostrar su menosprecio por la tecnología, lanzó el chorro sobre el electrizado
hilo con la consecuente descarga lógica de ser el líquido un excelente
conductor de la energía y por tanto le regresó la descarga que lo hizo
tambalearse cayendo sentado sobre una Mierda de vaca.
Aquí faltó comprender a Tesla.
Junio de 2018.
|
||||||
Poesía
Amantes Eternos (D.R)
(Romance)
Por Yolanda
CEJA GARCÍA
Ciudad de
México
|
Poesía
En Libélula
nocturna Mayo 2016
Algarabía (Soplos en reclusión) y Aquí
Por Blanca
Estela ROTH
Ciudad de
México
|
||||||
Clama el alma del guerrero
al volver de la batalla,
desolado y de rodillas
llora a los pies de su amada.
Tizoc, padre de la joven,
lo envió a empuñar las armas,
a encontrarse con la muerte,
lo mandó a su antesala.
Al conquistar la victoria,
porta en la mano su lanza
y la máscara enemiga,
orgulloso de su hazaña.
Iztaccíhuatl yace inerte
con flores e inmaculada,
la pobre expiró de pena
al sentirse atormentada.
Creyendo a su amado muerto
enfermó avasallada,
dormida está la princesa
con su diadema de plata.
Popocatépetl la besa
y la lleva a la montaña,
ahí se queda dormido,
cubierto en sábanas blancas.
Quetzalcóatl vela el sueño
de las nieves esmaltadas,
son los amantes eternos,
en medio la Luna aguarda.
Hoy nos dice la leyenda,
que juntas se hallan sus almas,
él permanece enojado
y ella, tan enamorada.
|
1.- Algarabía
(Soplos en reclusión)
Te ríes porque flor abierta
cuando tengo ganas
de caricias, alocada me lanzo
a las tuyas y tu risa
se vuelve el ritmo
en que penetras
con música de magia
a cada una de las células
de nuestros cuerpos.
La risa sólo se
silencia por besos
que devoran
y quedan los suspiros presos.
2.- Tu
llegada (Periquete)
Es como eso que sucede
porque no ha sucedido.
Cae la ventisca
se desgaja el árbol
cruje la montaña
se salta el río
oyes el trino
nace la lágrima
sucede porque no
había sucedido.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario