Miuris Rivas
Santiago De Los Caballeros, Santiago, Dominican Republic
Email: miuris.rivas@icloud.com
Escritora de muchas letras infinitas, amante de las letras desde niña.
Dominicana de nacimiento y por amor patrio, española por espeto a una
tierra que me ha abierto los brazos.
Escritora de versos y de narrativa, periodista que ahonda en problemas
sociales en un mundo saturado de injusticias. Me place más la faceta del
periodismo cultural y social y como tal, soy articulista en diversos medios.
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La
sombra
Parece que se va,
pero se queda,
instalada más allá de las ganas.
Parece que me suelta,
pero no,
es más fuerte que la voluntad,
se asemeja al amor
que permanece aún después de haberse ido.
La nostalgia es el Cáncer del alma,
en cualquier instante nos asalta.
Su escondite es la sombra,
la angustia es su argumento.
Vuela como lechuza infausta,
deja a su paso una escarcha
que se diluye en lágrimas
que ciegan.
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La
inconstante felicidad
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Palabras
adaptables
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La felicidad es circunstancial, va y viene, toca unas puertas y pasa de
largo frente a otras.
Sin tal vez, es doloroso saber que hay quienes ni la conocen, ni serán
rozados por ella.
Es veleidosa y frágil, se aleja en un instante y en un instante deja
desolado a quien llegó a creerse dueño/a del mundo.
La felicidad es un espejismo, un rayo de luna que puede cualquier noche,
sucumbir entre oleajes.
¿Podría decirse que es una utopía? Es posible que así sea, o que se
confunda con la resignación, o un egoísmo tan grande que llega a cegar.
¿Que nos da la constancia de que somos felices? A veces nos mentimos a
nosotros mismos y confundidos entre mínimas gratificaciones, pensamos que
somos felices, sin embargo, tan quebradizo es ese estado, que se esfuma como
pompas de jabón tocadas por el sol.
No la persigamos, seamos receptivos y vivamos, eso sí, sin conformarnos
miserablemente con situaciones que nos dañan, debemos siempre tratar de mejorar
esas condiciones de vida que nos hacen desdichados, pero sin que en nuestra
mente se fije la idea de una felicidad que como tal es definida por la
mayoría, tal vez nunca apresemos para nuestras vidas.
Ella es como una visión fugaz cuya captura puede desquiciar y lo más
saludable que podemos implementar es alcanzar un grado de satisfacción
existencial de una manera digamos menos tangible, pero más intensa, menos
material y más subliminal.
Los eternos diletantes de aconsejar sobre las buenas vibraciones,
sugieren fijarse cosas como la belleza de la puesta del sol, el vuelo de las
gaviotas junto al mar, quizá sea conveniente seguir sus consejos, aunque
personalmente yo volaría si pudiera, ello me haría sentir libre de mis
cadenas invisibles, sería una forma de felicidad.
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Para que lo leas en algún momento, no importa cuándo ni dónde, puedes
olvidarlo o guardarlo en tu corazón.
Quiero decirte que soledad, no siempre significa estar a solas, que
tanto sume a veces en el silencio, que hasta el latido del corazón espanta,
siendo además tan "solitaria", que estando rodeados de algarabía,
nos sentimos solos.
Para que, en medio de la noche, alguna vez recuerdes, que cerca o lejos,
nunca se sabe quién nos recuerda, o nos olvida.
Escribo sobre todo para mí, porque escribiendo, me libero de los garfios
que me apresan, también escribo para ti y para todos los que, dentro de su
vestimenta humana, admitan estos sentires.
Mis letras son para los justos e impíos, a unos, agrego una raya a sus
blasones, a los otros, cuya falsedad les arruga el alma, les comparto estas
reflexiones para humedecer con unas gotas de compasión, las grietas de su
alma.
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