Microcuento
* El figurín
Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
* “El niño viajero” ©
Por Román LÓGLEZ
Palenque, Chiapas
* Dos noticias
Por Octavio RAZIEL
Ciudad de México
Poesía
* Dos poemas para Pascual Borzelli
Por Roberto LÓPEZ MORENO
Ciudad de México
* Gusto a Mamá
Por Vilma Edith PÉREZ CERVANTES
Matamoros, Tamaulipas
* Fragmentos
Por Mario ÁLVAREZ RODRÍGUEZ
Palenque, Chiapas
* Estudio en I.
Por Raúl DE THESY Y RR.
Palenque, Chiapas
Microcuento
El
figurín
Por Mario
Luis ALTUZAR SUÁREZ
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
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“El niño viajero” ©
Por Román LÓGLEZ
Palenque,
Chiapas.
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- … no. ¡No lo sé! La verdad quien sabe quién ganará las presidenciales.
Pero sí sé que el irlandés será presidente.
- ¿Cómo es eso? Si no sabes quién ganará la elección ¿cómo predecir
quien será el presidente?
- El que todo lo maneja, ese titiritero de ascendencia en Agualeguas,
Nuevo León, ya lo decidió.
- ¿Pero el Presidente…?
- Ya lo sabes que él preside… en esa figura monárquica de oropel ¡y no
manda! ¿O crees que la Reina manda o gobierna?
- Pero vivimos en una democracia…
- Una democracia mediática y reducida a la simulación de un proceso
electoral pagado por los espectadores. Quedó muy claro en Chiapas, ¡Ni se
preocuparon por cubrir las formas! A sugerencia del Incómodo, el Gran Mandón ordenó
quien será el gobernador. Su hermanito estuvo casado con una descendiente de
la oligarquía bastarda chiapaneca y por ello la fuerza de un peloncito que
vive en San Luis Potosí, pero desempolvaron en diciembre. Y de ahí, la línea
que obedeció el Primer Copetón del país. ¿Crees que les importó lo que
pensaran los chiapanecos? Como en el ejército: Las órdenes se cumplen, no se
discuten. Así ha sido en los más de 500 años en que simularon la llegada de
una civilización.
24 de enero 2018
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Llegamos tarde. Todo estaba oscuro. Un silencio profundo invade el
momento. Solo se oye el canto triste de los grillos, en medio de esta gran
soledad. El grito desesperado de las chicharras, se oyen por doquier; el
día se les va inminentemente de sus manos y no pueden detenerlo. Mary,
Owen y yo, estamos bajo la mirada de millones de agujeros brillantes y de
la sonrisa del viento, que quiere calarnos los huesos con el frio nocturnal.
Sobre mis hombros corrió certero un escalofrió. Recordé la travesía de
Owen, por el tiempo; sus constantes y fuertes gritos de su infantil pecho y
el escurrir de sus fosas nasales que siempre lo ahogaban. Me dije,
sobre poniéndome a las brisas invernales, ¡no! A Owen no lo van a tocar esta
vez. Busque inmediato cartón y construí una casita, con sus ventanas y
puertas y Owen se acomodó en su interior. Y como dos guardias reales que
escolta a su rey, nos quedamos a fuera, en medio de esa calle triste,
solitaria y oscura de un pueblo mágico, en su feria decembrino. Solo
percibimos las notas musicales del pluricordio morfiano; luego interrumpidos
por los hilos de oros del gran Helio, que nos volvió a la realidad. Owen,
listo para comenzar su día en la vendimia artesanal.
6 de diciembre del 2011. En Juárez Chiapas,
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Dos poemas para Pascual Borzelli
Por Roberto LÓPEZ MORENO
Ciudad de
México
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Gusto a
Mamá
Por
Vilma Edith PÉREZ CERVANTES
Matamoros, Tamaulipas
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Duda
¡Sí! No sé,
Pascual Borzelli,
no, si tu galería fotográfica
es un fichero de aciagos dementes
o sólo de frustrados criminales.
Lo que sí sé, ¿o no?,
es que en tu archivo de flagrancias
nos encontramos,
perfectamente clasificados,
esos,
los que alguna vez, hemos
pretendido asesinar el tiempo.
La Revelación del Pago
Pascual:
adelanto la mano y te saludo,
pero, ¿quién te saluda?
¿ese viejo que cree que no soy yo,
pero que sigo y que sigue siguiendo en la
pantalla?
¿el que nunca creyó que algún día iba a
ser eso…?
¿Yo? ¿López Moreno? ¿El mero mero?
¿El santo más cabrón de la pradera?
Pascual… pero ahí estoy,
¿o es que tú me inventaste con esa nueva
mueca
que no me conocía?
¿Detuviste el tiempo con la sabiduría de
tu cámara
o por el contrario, tan sólo me lo echaste
encima?
Pero bien,
No quiero hablar más de eso.
Sólo quiero decir, Pascual Borzelli,
que eres mago de todas las edades,
que has inventado con tu genio a un
personaje
que yo no conocía.
Que ese soy yo, aunque yo no quiera serlo.
Aunque no quiera “porque juro no ser ese,
porque yo era un joven escritor
que se comía la lumbre a puños
y sólo se mantenía en espera de que
supieran
que lo que brillaba en la página era su
vibrante letra”.
¡Qué grande eres Borzelli!
Inventaste un personaje, una novela,
y ahora quieres que yo sea ése que creó tu
cámara.
Admiro la tu magia, la albinegra novela
que engendraste,
pero me niego a entrar en la pantalla de
la computadora,
bueno…
hasta que no me deshaga de estos tristes
achaques
que me impiden asumirme plenamente.
Mientras… haz ¡click! con tu máquina del
tiempo,
con tu maquina diabólica y versátil
y dile al mundo:
“Así conocí a Roberto López,
el que creía que se comía la lumbre a puños”.
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-Iván, deja de pelear con tu
Hermanito.
-Amá, él también me pelea.
-Mira, ante mí siempre saldrás
Perdiendo.
-¿Por qué, ama?, el también me
Pega.
Mira, le llevas cuatro años y eres
Mucho mas alto que el, le ganas
Desde tus pies hasta la rodillas.
Por eso para mi, que le pegues a
Dario es un abuso.
-debemos de estar del mismo
Tañano para pelear?
-asi es.
Ivan escucho el silbato que hacia
Temblar la casa todos los días. En
Un par de minutos podría pegarle
A Dario.
Contento, salio a la calle y
Acomodo las piernas en los rieles
Del tren y espero.
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